Hay que hacer caso a las señales del tablero, sino que me lo digan…
El lunes pasado cuando venia de Santiago cargado con andamios y mi compresor regalón a supervisar mis trabajos en Viña del Mar y Valparaíso, a la altura de Casablanca
en el tablero de la Nissan se prendió una discreta figurita roja con forma de batería,
...bah que raro si la batería está nueva…entonces apagué las luces y con mis ojos de gato le peleé a la neblina.
El miércoles pasando por el litoral desde Concon frente
a la roca congelada (prometo tomarle una foto y contarles la historia)
de nuevo la figurita roja en el tablero, que extraño…y seguí, cuando llegue a Santiago la mando a revisar.
Pero ayer cuando iba a dejar a los maestros a la pensión, quedó la cagá, eran las siete de la tarde y en plena Av. España con un transito (el trafico es el de drogas oiga) como decía con un transito que se mueren,
se me para la Nissan, se apagan las luces y el
motor kaput, estoy a metros de la Caleta Portales, no tengo flachers, se baja el
Parrita y hace señas para sacar a la tremenda micro que se me pegaba,
(al Parra no le vienen con cosas), le doy contacto y tiene luces de tablero, le doy arranque y parte…ya súbete parrita y entramos a la caleta ahí la paro y pensamos, me queda una raya de batería del celular, llamo a mi clienta y no está ubicable, cresta…
Bueno, si parte y se prende la batería debe ser el regulador de voltaje o el condensador, los carbones, que se yo, pero aquí botados no sacamos nada,
Jefe llamemos al pelicano, al dueño de la pensión, espera, voy a llamar a mi suegro por si sabe de algún eléctrico…
Nada, nadie sabe nada, le doy contacto y arranque…tantán…parte, ya parrita te voy a dejar, si quedamos botados le hacemos empeño de nuevo,
subimos el Cerro Placeres y te dejo cerca de la pensión cabrito, todo un éxito, lo dejo, bajo por Yolanda y de nuevo en la Avenida España, voy con las luces apagadas y rogando que no pase nada,
pero pasa…A unos trescientos metros de la subida al
Cerro Recreo de nuevo le da el infarto y se le apaga el disco duro a la Nissan, suerte que iba por la pista derecha pegado al cerro pero los buses y las micros vienen rajadas, no tengo nada de batería, la quinta luz de freno (¿o es la 3ra?) aun prende,
saco la mano y aleteo para que me vean que estoy detenido, a esas alturas ya estoy con taquicardia,
los chóferes malditos van sobre 100 Km./hr. y a ultima hora me esquivan metiéndose entremedio de la pista central provocando una pitadera de bocinas que ni les cuento, no falto el desgraciado que me grita prende las luces…y la que te dije desgraciado…otros me tocan la bocina y me levantan luces, como si yo estuviera haciendo una encuesta pa’ver que pasa cuando uno se detiene en una autopista de alta velocidad en la noche y sin luces…los desgraciados…
¿Qué hago? Solo sin recursos mecánicos,
estoy hasta el sagrado perno…Cuando baja el flujo después del semáforo me bajo y la empujo para atracarme mas a la cuneta y salir de la curva, lo hago hasta que las cañuelas se quejan, a veces tengo que tirarme adentro de la cabina para que no me atropellen.
Con el ultimo tiriton del celular
llamo al parrita…
Tráeme al pelicano que estoy botado en la Avda. España al llegar a la estación del Recreo del metro…me pesca y me alcanza a decir ya jefe y se corta…
Antes en mi desespareción dije San Expedito sácame de este forrito desesperadito, ¿conocen a
San Expedito? Hace favores rapidito y dicen que nunca falla, y que me lo digan a los quince minutos cuando ya no me quedan piernas para empujar mas ni brazo pa’seguir aleteando y sufrir finitos en la carrocería de la Nissan aparece el pelicano, un personaje, parece Popeye lo acompañan dos secuaces porteños y parrita, cuento corto en la casa del suegro al rato y descansando del susto. Hoy reparado el alternador por $16.000 miren por esa plata pasando los más grandes sustos de choques.
Moraleja, hagan caso de las señales del tablero de su vehiculo, no lo ignoren.